En el arranque de su campaña, tuve la oportunidad de charlar con Ernesto Ruffo Appel, legendario panista que abrió el camino para que su partido, Acción Nacional, llegara a la Presidencia de la República y quien, una vez convertido en el primer gobernador de oposición del país, implementara la primera credencial para votar con fotografía, que después copió el gobierno federal encabezado por Carlos Salinas de Gortari para crear la que hoy conocemos como credencial del IFE que la usamos para todo pero cada vez menos para votar.

Veintitres años han pasado desde que la Ruffomanía lo llevó a la gubernatura de Baja California, después de que sus seguidores cuidaran día y noche los votos en  la escuela Miguel F. Martinez del centro de Tijuana ante la amenaza real de que se robaran las urnas como sucedía en ese tiempo en muchas elecciones.

A pesar de que luce visiblemente más delgado y tiene menos cabello cubierto de canas, el político ensenadense y sandieguino de nacimiento, sigue conservando su mismo tono al hablar, le molesta lo mismo y espera que los ciudadanos de una vez por todas asuman su papel para que los políticos cumplan su obligación de servir a todos.Antetodo él se define como empresario preocupado por los asuntos socuales.

Muy lejos ya de su lucha contra el gobierno priísta y con su partido en el poder, Ruffo reprocha a los partidos el haber abandonado a los ciudadanos para enfrescarse en su lucha por el poder,sus intereses y sus negocios particulares.

Aunque sin la misma energía y con un México diferente en muchos aspectos, El ex mandatario bajacaliforniano espera convertirse en Senador de la Republica para desde ahí, impulsar el desarrollo de la frontera que no siempre es entendido por el gobierno federal desde la Ciudad de México,porque como él dice "nos atienden pero no nos entienden".

Tratará,asegura, de continuar el trabajo que inició cuando fue presidente de la Comisión para la Frontera Norte durante el gobierno de Vicente Fox, a la cual renunció por tiempo después por no encontrar el apoyo necesario de su entonces jefe directo.

Escencialmente Ruffo sigue siendo el mismo,habla igual, piensa lo mismo,tiene lamisma mirada y se conduce con la  sencillez que en su momento convenció a la mayoría de los electores bajacalifornianos.

 Sin embargo muchos de los que lo acompañaron en su triunfo del 89 han crecido,algunos son ahora políticos importantes, el PAN sigue en el Gobierno del Estado, el desgaste de la propuesta panista es evidente y hay quienes, invocando su ejemplo, terminaron sus adminstraciones fuertemente cuestionados por actos de corrupción o al menos por poca higiene administrativa.

Será interesante  ver que tanto el legendario  político a sus 59 años de edad  puede reencender la ruffomanía y sostener con ella la gris figura de Josefina Vazque Mota, candidata del blanquiazul a la presidencia del país,porque muchos de los electores actuales no habían nacido cuando Ruffo conquistó la gubernatura y el Partido Acción Nacional no había adquirido los vicios que da el poder.